viernes, 31 de octubre de 2008

EEUU Y EL CAMBIO INTRODUCCIÓN

En la presente campaña de Estados Unidos se ha puesto de moda en ambos bandos mayoritarios el hablar del cambio. Todos reconocen la mala gestión de Bush, incluído McCain, el candidato republicano. Mientras no se derogue la pena de muerte, se facilite el aborto, o se permitan los matrimonios homosexuales, no existe tal cambio. Al menos han centrado los debates en lo económico, que ya significará una ayuda para el contexto internacional. Se alude al cambio como si la gente a estas alturas pudiese creer que los políticos son diferentes, que sus ideologías distan mucho. Se menciona el cambio para convencer y ganarse el voto de la ciudadanía, aprovechando que ésta necesita el cambio urgentemente. Es la palaba clave, la palabra bisagra, que abre las conciencias del pueblo. En los debates que se han ido sucediendo a lo largo del último mes, hemos podido ver, a grandes rasgos, una Sarah Palin que ha aguantado el tipo, al gual que su presidente, a un Obama impecable, también en su forma de vestir, todo milimetrado, sin grandes sorpresas. A no ser por cómo se escapaba rápidamente el senador McCain de la universidad de turno, o por esa campaña agresiva de márketing político que llegó a acusar a Obama de ser amigo de los terroristas, por ejemplo. Además, a modo de introducción, también es lícito referir que la distribución de la renta es un tema siempre clave. Los demócratas, tradicionalmente abogan por repartir la riqueza, y los republicanos son más conservadores, y son partidarios de bajar los impuestos, también. Así pues, no es de extrañar que Obama haya insistido en los diversos debates televisados en ayudar a los más desfavorecidos en ese sentido. Sobre política exterior, o no se ha querido entrar, o se ha hecho ambigüamente. Vencieron los demócratas mayormente los debates, y en las encuestas van ganando por varios puntos de diferencia. McCain propuso a Obama realizar más debates de los pactados. En mi opinión, el senador de Ilinois debería haber aceptado, no sólo porque lleva ventaja, sino dado que la campaña de los republicanos estaba comenzando a parecer desesperada. Incluso algunos comentarios de esa parte se agarraban al clavo ardiendo del efecto Bradley. En fin, soy Moisés Martínez Sellas, y trataré de valorar en este blog las elecciones en EEUU.